sábado, 2 de diciembre de 2017

La Belleza. Noviembre 2017.

De la serie: Mandalas de Procesos.
 La Belleza.
Acrílico sobre tela.
16"x 16". 2015.
La belleza del universo, el cielo que nos sirve de techo a la casa de todos, los astros, las galaxias, los planetas y la tierra donde vivimos, todo a nuestro alrededor es bello. El sentido estético es parte de lo que los humanos somos y cuando miramos sin prejuicios en la mirada hay belleza por doquier.

Cuando se vive en una isla cuyo entorno natural es el mar con montañas de infinitos tonos de verde, la belleza es tan parte de la mirada diaria que muchas veces fallamos en celebrarla. En un medio ambiente tan hermoso no hay que ir a ningún sitio específico, no hay que hacer viajes largos, solo hay que salir al exterior y en cualquier esquina de cualquier espacio la belleza te acompaña.

Cuando María calmo sus vientos y pudimos salir al  exterior esa belleza según la conocíamos tenia arrancadas las hojas de cada árbol. Las casitas pintadas de colores vivos tan típicas del Caribe yacían en el suelo echas escombros. Sus moradores miraban sus hogares y pertenencias con incredulidad y lágrimas muchas lágrimas.  En muchos casos los arboles completos de cien, doscientos, trecientos años estaban separados de sus raíces y arrancaban las lágrimas de todos. La sensación de desolación era inmensa, la exuberante belleza de la naturaleza  a la que estamos acostumbrados ya no estaba.

El sentido de lo estético es una necesidad que no puede faltar en la experiencia humana, la misma experiencia de vida con sus múltiples matices es impresionante en su belleza. Belleza que no podemos apreciar porque anteponemos los prejuicios y las maneras culturales de apreciarla. Cualquier proceso humano es bello, puede ser difícil pero bello, puede ser un reto pero no por ello pierde su belleza.

La belleza de un huracán categoría cinco que arropa una isla de 100x 35 esta todavía por descubrirse, no la destruyo, la movió de lo que era, intento cambiarla por dentro y por fuera para regalarnos una nueva oportunidad de vida y eso es belleza. El reto mayor y el más bello está por descubrirse: ¿Cómo vamos a escudriñar en esta nueva belleza, cómo la vamos a incorporar a nuestro diario vivir y cómo esta experiencia nos impactara en nuestro proceso de vida de país?. Nada de lo que sucede es para destruirnos y si lo reflexionamos  detenidamente siempre le encontramos, su belleza.

La autora es Psicóloga Clínica en práctica privada.
(787) 399 3114